El centro libanés para los derechos humanos (CLDH) es una organización local sin fines de lucro, no partidista libanés de derechos humanos con sede en Beirut. CLDH fue creado en 2006 por la Franco libanesa movimiento SOLIDA (apoyo a libaneses detenidos arbitrariamente), que ha estado activo desde 1996 en la lucha contra la detención arbitraria, desaparición forzada y la impunidad de esos humanos bruto perpetrando violaciones de los derechos.
CLDH monitorea la situación de los derechos humanos en el Líbano, lucha contra la desaparición forzada, impunidad, las detenciones arbitrarias y racismo y rehabilita a las víctimas de la tortura. CLDH regularmente organiza conferencias de prensa, talleres y reuniones de sensibilización sobre cuestiones de derechos humanos en el Líbano y recoge, registra y documenta abusos de los derechos humanos en los informes y comunicados de prensa.
Equipo CLDH en el suelo apoya las iniciativas encaminadas a determinar el destino de los desaparecidos en el Líbano.
CLDH sigue regularmente en numerosos casos de detención arbitraria y tortura en el Líbano en coordinación con las organizaciones libanesas e internacionales y con el grupo de trabajo de las Naciones Unidas sobre detención arbitraria y el Relator Especial de la ONU sobre la tortura . Proporciona asistencia legal para los internos.
CLDH abrió en 2007 un centro de rehabilitación para las víctimas de la tortura en Beirut, centro Nassim (nassim significa una brisa), miembro del Consejo (Consejo Internacional de rehabilitación para víctimas de tortura), que proporciona apoyo profesional multidisciplinario y caso gestión para las víctimas de la tortura y sus familias.
CLDH compila una revisión diaria de la prensa sobre las violaciones de los derechos humanos y poder judicial en curso en el Líbano y las actualizaciones de varios blogs de los derechos humanos.
CLDH es miembro fundador de la Federación euromediterránea contra forzadas desaparición (FEMED), miembro de la red euromediterránea de derechos humanos (REMDH), miembro de la red SOS de la Organización Mundial contra la tortura (OMCT) y de FIDH (Federación Internacional de los derechos humanos).