Desde 1999, Musicians without Borders ha estado utilizando el poder de la música para la consolidación de la paz, conectando a la gente, empoderando a los músicos como activistas sociales y capacitando a los jóvenes locales como creadores de cambios. El compromiso a largo plazo permite a los participantes el tiempo para desarrollar habilidades y talentos, procesar el duelo y la pérdida, y construir puentes de reconciliación en sociedades divididas por conflictos recientes o en curso.
Donde la guerra ha estallado, la gente necesita todo para volver a la vida: comida, agua, refugio, ropa, medicina. Pero más que nada, la gente necesita esperanza. Para reconciliarse, la gente necesita empatía. Para sanar, la gente necesita conexión y comunidad.
La música crea empatía, construye conexión y da esperanza.
Nuestra misión es salvar las divisiones, conectar comunidades y sanar las heridas de la guerra usando el poder de la música.